El placer de comer
Como dijo el poeta Leonardo de Lozanne, “No todo está perdido no todo está mal, no todos son villanos queriéndote matar, la vida es un picnic”. Yo creo ampliamente en que la comida se ha hecho para disfrutar y no ser un pesar. ¿Pero como logramos eso? ¿Cómo puedo llegar a un restaurante confiado de lo que voy a comer será beneficioso para mi, si mi madre/esposa no es la que está supervisando lo que cocinan? ¿Con que frecuencia comeré algo fuera de mi “régimen alimenticio”?
Los regímenes alimenticios deben estar diseñados para cada uno de los pacientes, no para una familia ni para una pareja. Cada uno requiere de necesidades diferentes a los demás. Yo, estoy a favor más que llevar un régimen, aprendamos a comer.
Ya debí haberte convencido que no merece la pena malgastar tu tiempo, tu dinero y tu esfuerzo con dietas mágicas.
Al momento de sentarnos en ese lugar el cual hayamos decidido o tu pareja te haya invitado, debemos de evaluar el menú, no te digo que te fijes solamente en el apartado que dicen “ensaladas” por qué muchas veces la cantidad de calorías que nos aporta una “ensalada” de restaurante, nos llega aportar un plato de pasta o un corte de carne (entrecot). Los conocimientos doy casi por hecho que los tienes, que tu sabes perfectamente que es lo que te aportara más y que menos, simplemente ya el hecho de haberte sentado, tiras la toalla y dices “solo por hoy” pero ¿Por qué no mejor optas por los platos más saludables? Esto no significa que serán menos ricos para tú paladar.(Esta pauta no es valida para los changarritos/chiringuitos de “Doña Mary” donde solo hay frituras, tacos o tamales) Evita ir a estos lugares. “Danger Zone”
Hablemos de los azúcares, no sólo nosotros somos los que añadimos azúcar, la industria alimentaria también añade azúcares y edulcorantes artificiales en sus productos. Evitando los alimentos que contengan azucares añadidos reducirás tu ingesta calórica total y conseguirás inmediatamente que tu comida sea más sana. Además te sentirás mejor cuando te consientas de vez en cuando con un croissant o algún chocolate negro, por que sabrás que estas ingiriendo azúcar por que tú lo has decidió y no por que alguna manipuladora empresa lo haya introducido.
Ingiere grasas saludables siempre que estén disponible de forma natural en los alimentos, como ocurre en la carne, los aguacates, los frutos secos, la leche y el queso, la grasa le da sabor a los alimentos y proporcionan la sensación de saciedad.
Añade proteínas de calidad, los beneficios de una dieta rica en proteínas se extenderán mas allá de tus músculos, las proteínas amortiguan el hambre y pueden prevenir la obesidad, la diabetes y las enfermedades cardiacas.
Compartiendo algo que personalmente pongo a la practica, ya que si mi familia o Loli te contará, no hay nada que me guste más que ir a un buen restaurante (Y no por decir “buen”, me refiero a de precio elevado) y pasar una buena comida/desayuno/cena.
Dependerá del horario en el que me encuentre, será el tipo de alimentos que voy a ordenar, si es para desayunar o realizar “Brunch” pediré un desayuno con que incluya proteína, puede ser desde un lácteo, hasta huevo o jamón, dependiendo de la oferta, así que no dejes por fuera en cada uno de tus comidas incluir siempre proteínas, en la noche busca ingerir una menor cantidad en general de todos tus alimentos.
Recuerda lo que siempre te he dicho, solo será de vez en cuando, un día a la semana incluyendo los sábados y domingos, así no alteraremos nuestro balance que hayamos establecido los demás días de la semana.
Todo lo tienes en tus manos, yo no te digo que dejes de comer, simplemente te quiero ayudar a que tomes la mejor decisión que prometo que es igual o más sencillo que ganarle al Real Madrid (Lo siento madridistas, a claro no le voy al Barca).
Unos investigadores de Australia, Indonesia y Suecia estudiaron las dietas de 400 hombres y mujeres de edad avanzada y descubrieron que los que comían más hortalizas, verduras de hoja y frijoles eran los que menos arrugas tenían. ¿La razón? Estos vegetales son muy ricos en sustancias que ayudan a prevenir y reparar el desgaste natural de las células de piel provocado por el envejecimiento.
