En la Zona
Conforme avancemos iremos dando un tour por alguna de las dietas más seguidas a nivel mundial, y está es una de mis favoritas. En lo personal no la encuentro perjudicial y presenta muchas cosas a favor, pero lo importante de todas las dietas es saber qué es lo qué TÚ organismo necesita, en varias ocasiones te he mencionado que todos los regímenes son personales, habiendo dado esta pequeña introducción, y si aún no has tomado tu taza de café estas en el momento indicado para hacerlo, comienza la segunda parada de este tour con destinación una vida saludable.
La dieta de la zona propone perder peso reduciendo la cantidad de carbohidratos de la dieta, sin erradicarlos por completo. El valor calórico total se distribuye en 40%-30%-30%, siendo estos los porcentajes del total de energía que se cubrirán por hidratos de carbono, proteínas y grasas respectivamente.
La “Zona” hace referencia a que en el organismo existe un balance hormonal adecuado. Es decir, a que los niveles de insulina no son ni muy bajos ni muy altos y así, lo que falta de carbohidratos en el consumo diario para enfrentar el gasto energético, es brindado por las grasas.
El 40% de los hidratos ingeridos, no todos se consideran favorables en la dieta de la zona, sino que se tratará de elegir frutas y verduras, limitando la cantidad de pasta, patatas, cereales y legumbres.
Algo similar sucede con las proteínas que se recomienda escoger carnes magras y lácteos desnatados, pero aquí lo importante es que sin límite en cantidad, es muy probable que consumamos muchos menos carbohidratos de los que realmente se indican en la dieta de la Zona. Pudiendo caer así, en una dieta cuasi-cetogénica y desequilibrada.
A favor de la Dieta de la Zona
En general presenta más beneficios que inconvenientes y se puede decir que: Es efectiva y equilibrada.
Una cosa muy buena que tiene la dieta es la obligación de comer 5 veces al día y desayunar siempre.
El consumo moderado de grasas, que hace bajar el colesterol.
El consumo moderado de proteínas, para no sobrecargar los riñones.
Otro punto positivo es que recomienda la práctica de algún deporte.
Las 5 comidas son pequeñas, pues no se debe sobrepasar las 1.100 calorías diarias.
Esta dieta no generaría graves riesgos para la salud si se incluyen carbohidratos derivados de las harinas, aunque sea en pequeñas cantidades. Pero como tantas otras, nos enfrenta con las pastas, la patata y el pan al crear en estos alimentos la fama de “engordantes” cuando en realidad, no poseen grasas y consumidos en cantidades razonables, pueden ser perfectamente incluidos en una dieta para perder peso.
Por el día de hoy hemos terminado con el análisis de la dieta de la zona, como mencione al inicio, es una de las que con mucha seguridad puedo prescribir a mis pacientes, teniendo en claro que resultado sea el que se busque, sin tener miedo de caer en desequilibrio nutricional, pero recuerda que siempre tenemos que ir de la mano de un profesional de la salud. Esta dieta tiene el sello de mi humilde aprobación. (ojalá me pagaran por decir esto)
Jennifer Anniston múltiples ocasiones ha publicado que la dieta que lleva es el método de la zona más una rutina de ejercicio diario que incluye yoga, cardio entre otras.
Aquí te dejo el link para que evalúes algunas recetas que ellos recomiendan, recuerda no iniciar algún régimen sin supervisión;
http://www.enerzona.es/herramientas/recetas-enerzona/